La importancia del tipo y talla del sillín.

     Aquí tenemos un claro ejemplo de la necesidad de tener un sillín adecuado a las características de cada ciclista.

     Este caso además es reseñable ya que el cliente tiene una dismetría de miembros inferiores de más de 5 mm que no ha hecho falta corregir.

     En este caso el cliente venia con un sillín marca essax de 130 mm de ancho.

     Al observar al cliente me llamó mucho la atención la hipermovilidad reaccional que existía en la pelvis.
     Cambiamos el sillín por un selle italia 145 mm de ancho.
   

     La valoración subjetiva del cliente fue la típica en estos casos: «ahora si que noto los huesos apoyados».
     La valoración objetiva la vemos en el vídeo. Se consiguió fijar las caderas y aumentar la potencia de pedaleo.
 

Colocación de las calas.

Lo primero que tenemos que hacer para colocar las calas correctamente, es encontrar el punto medio de la linea que une la primera articulación metatarsofalángica del primer dedo (dedo gordo, zona del «juanete») y la quinta articulación.

Es preferible ponerse las zapatillas y marcar con un rotulador o esparadrapo estas articulaciones y luego trazar una línea por la suela para marcar este punto medio.
Este punto es donde debe coincidir con el punto central de nuestras calas.

Ya tenemos el primer paso hecho. Ahora hay que verificar la rotación de las calas. Una manera simple es sentarse con nuestras manos debajo de los muslos y mirar si nuestros pies están rotados hacia fuera o hacia dentro.

En esta postura que alguien os ayude y haga una flexión de tobillo hacia arriba para ver la rotación que se produce para rotar las calas y que el pie en el pedal quede en esa posición.

En esta posición con los pies colgando también podemos ver la angulación del antepie. En algunos modelos de calas se puede ajustar estas angulaciones.

Una vez ajustados estos parámetros nos sentamos en la bici con los pies en los pedales y miramos si muestra pierna esta recta. Recordad que tienen que estar en la misma vertical cadera, rodilla y pie. La gente ancha de caderas tendrá que mover las calas hacia adentro para que la zapatilla se mueva hacia fuera para que estos tres puntos estén alineados.