Fisioterapia y Biomecánica del ciclismo. Caso clínico. Cuñas y rotación de cadera.

   

     Caso muy curioso de un ciclista que contacta por molestias en el períné, según comenta aparecen al día siguiente de haber montado. Competía de joven, ahora sale a disfrutar de la bicicleta. Los signos que describe son compatibles con una prostatitis crónica. En unos días tiene cita con el especialista. Describe también molestias en las dorsales altas.

     Me comenta que la bicicleta se la consiguió un biomecánico al que acudió hace tres años, una talla 54 para una persona de 1,76 mts., el sillín adelantado al máximo y cuñas para el «control de varidad del antepie» en ambos pies como se observa en la fotografía (cuñas que llevaba el cliente).
 

     En el examen biomecánico lo primero que me llama la atención es el sillín estrecho que usa ya que no logra fijar las caderas rotándose en el sillín.

     Quitamos las cuñas de ambos pies y volvemos a examinar…¡Sorpresa! ahora se sienta perfectamente y las caderas bien fijadas.

     Es la primera vez que observo una rotación de cadera funcional por el sobre uso de cuñas para el antepie.


   
     Al seguir sintiendo el cliente la presión en el periné, probamos un sillín más ancho para obligar a la pelvis a utilizar el apoyo de los huesos isquiones. La prueba fue satisfactoria.

     La pega es que la bici es demasiado larga para él con lo que se recomienda una talla menor para poder ir más erguido y que la pelvis haga un apoyo más vertical liberando así el periné.

     Vídeo final con el sillín más ancho.

Fisioterapia y Biomecánica del ciclismo. Relación entre tracking rotuliano, torque y técnica de pedaleo.

     Caso clínico donde vemos la relación y consecuencias de un mal torque, una mala técnica de pedaleo, un tracking rotuliano patológico.

     Ciclista que acudió a la consulta después de un estudio biomecánico realizado hace tres años donde le intentaron solucionar estos problemas a través de la colocación de cuñas metatarsianas  y un alza provocando en el tiempo una tendinosis peroneal mecánica.
 

     Una vez quitadas las cuñas y tras haber realizado los ajustes necesarios el resultado fue alentador.

     En la primera revisión y tras poner un sillín mas ancho para evitar unas molestias en la piel, revisando el tracking rotuliano de esa pierna izquierda, se observa una técnica de pedaleo pobre tirando de los pedales hacia arriba. Trabajando el feedback con el computrainer conseguimos mejorar ese tracking rotuliano.
     La explicación de por qué puede mejorar tanto un ciclista viene dada por el conocimiento de la biomecanica.
     Si tiramos del pedal hacia arriba reclutamos al psoas ilíaco produciendo una rotacion ecterna dde la cadera cuando el pedal está más alto ya que cuanto mayor es la flexión de cadera mayor es el componente de rotación externa articular.
     Cuando el ciclista deja de tirar hacia arriba y comienza a empujar hacia abajo la aticulación de la cadera queda liberada por el psoas ilíaco para que empiecen a trabajar los grandes músculos extensores produciendo una rotación interna para volver a alinear el mienbro einferior en el mismo plano sagital para hacer lo más efectivo posible el empuje sobre el pedal.
   
     La solución fue cambiar la técnica de pedaleo.
     En un mes y medio volveremos a evaluar a este ciclista.          

    

Fisioterapia y biomecánica del ciclismo. Caso clínico.

     Este caso clínico es bastante curioso.
     Cliente que contacta por mail desesperado viendo que soy fisioterapeuta por si le puedo ayudar.

     Me comenta que después de tres biomecánicos de renombre persisten las molestias y que el último de ellos ya ni sabía que hacer.

     En los contactos le sugiero que venga primero a la consulta para verle y charlar ya que me extrañaba que  tres biomecánicos de renombre no hubiesen acertado a posicionarle en la bicicleta.

     Las principales molestias eran en el costado derecho por encima de la cresta ilíaca.

     Aquí un ejemplo de su postura: dentro de gravedad desplazado a la pierna corta, mayor apoyo en ese pie con el consecuente aumento de tono muscular.

      En esta primera sesión encontramos una torsión en la pelvis, contracturas lumbares, psoas, pinzamientos vertebrales sobre todo en la charnela dorsolumbar, contracturas cervicales superiores, etc.

     Tras una sesión, le derivo al médico y podólogo para realizar las plantillas para la vida diaria y running, comenzamos el estudio biomecánico sobre la bicicleta.

     Me comenta que ha cambiado de sillín tres o cuatro veces y también de manillar con el consiguiente gasto que conlleva, recomendado por los biomecánicos.

     Lo primero que me sorprende una vez más es observar la cantidad de cuñas y alzas puestas en las zapatillas sin criterio alguno. Cito textualmente la frase del biomecánico «ve probando tú, poniendo y quitando»..

         Una vez subido a la bicicleta observo que va caído a la derecha, hacia su pierna larga. El tracking patelar era correcto y en la imagen lateral se intuye que va bajo y retrasado con respecto al centro de gravedad de la bicicleta y al eje del pedal.
     Tras quitar las cuñas, alzas y ajustar el sillín correctamente el resultado fue alentador.
     En el video se ve a la izquierda como iba al principio y a la derecha tras realizar los primeros ajustes.

        A la espera estamos de una nueva tija que nos permita acercarle más hacia delante para acabar de posicionarle adecuadamente. Una vez acabada la bicicleta de carretera, comenzaremos con la de trialtón.
     La primera impresión ha sido tras una hora y media de rodillo que no dolía.
     Buen comienzo.
     Seguiremos contando.

Plantillas para el ciclismo. Parte II. Plantillas y/o cuñas.

   
 

     Una vez explicado un poco el por qué de las plantillas para el ciclismo, ahora toca debatir entre el uso de las plantillas, el uso de las cuñas o el uso de ambas.                                                                                    

                                                                                                             

Imagen de bikefit.com


     La mayoría de biomecánicos, tratan de corregir el varo del antepie.

     Para ello utilizan goniómetros y técnicas específicas para valorar este varo.

     Alrededor del 85% de las personas tenemos un antepie en varo.

      La norma general de muchos biomecánicos ha sido corregir este varo, poniendo cuñas a razón de cinco grados cada una  u otras más grandes de diez.

      Estas cuñas nos van a ir muy bien en el caso de tener una ligera debilidad del complejo articular del primer metatarsiano con la primera falange (zona del juanete) causada por una hipotonía del músculo peroneo lateral largo, entre otros.

      Lo habitual sería pensar que la suma de varo de antepie más tracking de la rótula anómalo igual a cuña o cuñas correctoras en la cala, pero no suele ser así.
  
        Este varo del antepie, fisiológico en la mayoría de casos, puede resultar estable a la prueba de fuerza, entonces si se ponen cuñas correctoras estamos cambiando la arquitectura del pie, del miembro inferior, etc

     Si corregimos el antepie y no estudiamos ni corregimos el resto del pie, tarde o temprano los ciclistas volverán a sufrir molestias, las mismas o peores, porque hemos cambiado la arquitectura del antepie.

     Por lo tanto, cuando valoramos el antepie, hay que valorar el resto del pie también.
     Hay que valorar la huella plantar en carga, en descarga, fuerza de la musculatura, movilidad articular global y analítica, la estabilidad del arco longitudinal interno (radio interno),articulaciones del miembro inferior, postura global etc.

     No podemos corregir un hundimiento del arco plantar o un desequilibrio de la articulación tibioperoneoastrgalina (el tobillo) a base de cuñas.
     En estos casos el uso de plantillas va a suponer que ese varo del antepié disminuya funcionalmente hablando, ya que cuando hacemos la presión en el pedal, el arco interno se va a ver sujeto por la órtesis dando estabilidad al tobillo, pierna etc. y no haga falta tantas cuñas en la cala.
   
     Ahora habrá que preguntarse que tipo de plantillas son las mejores…

Plantillas para el ciclismo. Parte I.

   
     Más de una vez he oído el comentario de «en el ciclismo no hacen falta plantillas porque se pedalea con la parte anterior del pie».
     Teniendo un pie con un anatomía perfecta y una mecánica articular perfecta, podríamos pensar que no hiciesen falta unas plantillas para las zapatillas de ciclismo, pero no suele ser así.

     Cuando pedaleamos, la cala debe ir colocada en el sitio exacto para que la presión que ejercemos se reparta bien por todo el antepie y el metatarso.

Imagen de Bikefit.com

     Claro, los que opinan que no hacen falta las plantillas se olvidan que los metatarsianos se articulan entre ellos, y con las cuñas y con el cuboides y el cuboides con el escafoides y estos con el astrágalo y luego etc. etc. hasta sumar 33 articulaciones en el pie, con lo que cualquier problema en una de estas articulaciones va a condicionar el comportamiento de las demás.

     Estos huesos se organizan para soportar la carga de nuestro peso así como para dar una flexibilidad en conjunto para la marcha.
     El pie lo dividimos funcionalmente en tres arcos, dos longitudinales y uno transversal que forman una bóveda. (Biomecánicamente existen más.)

     El arco longitudinal interno: el puente del pie.(Color verde en la imagen)
     El arco longitudinal externo: el borde externo de la planta del pie.(Color azul)
     El arco transverso: el arco que forman los metatarsianos. (Color rojo)

     Cualquier alteración en los arcos longitudinales provoca un cambio en la huella plantar, pie plano o pie cavo, provocando una reacción del resto de articulaciones para adaptarse a la manera de pisar, con lo que cuando pedaleemos, nuestro cuerpo, que esta adaptado a esta forma del pie, realizará un movimiento anómalo en el tobillo, la rodilla y la cadera, necesitando plantillas para minimizar estos movimientos reaccionales.

     Como en el ciclismo pedaleamos con el antepie, estamos supeditados a como se comporta el arco transversal metatarsiano.
     Si este arco fuese 100×100 estable y no hubiese lesión ninguna en el resto de articulaciones y musculatura afín, podríamos pedalear sin plantillas perdiendo poca fuerza.
     Y como en el cuerpo humano nada es sencillo, este arco suele fallar por la parte interna, produciendo un hundimiento de la base del primer metatarsiano (la zona donde sale el juanete) que a su vez provocará un hundimiento del primer arco longitudinal (el puente del pie) provocando una rotación interna de la tibia que obliga a la rodilla a un movimiento en valgo y a la cadera un movimiento de rotación interna en la sacroiliaca etc. etc.

     Para los colegas escépticos sanitarios, comentar que los grandes culpables de todo esto son los músculos tibial posterior y el peroneo lateral largo que unen directamente pie con tibia y peroné.
     Esta inestabilidad del arco transversal es la responsable de que pies a priori sanos y pies cavos necesiten plantillas para el ciclismo.
     Y aquí nos surge otro dilema, ¿cuñas o plantillas? ¿Ambas?
    Esto lo dejo para otro post.