Biomecánica del ciclismo. Adormecimiento de las manos. Enfoque postural.

     Mucho se ha escrito sobre el adormecimiento de las manos, las parestesias en el ciclismo, el atrapamiento o la irritación del nervio cubital en el canal de guyón, o del nervio mediano en el túnel del carpo.

     Sin embargo, son muchos los clientes que acuden a consulta, tanto de fisioterapia como de biomecánica, con estas molestias a pesar de estar  utilizando o han utilizado las ayudas externas que ofrece el mercado de la bicicleta como puños especiales o guantes con geles más densos. En muchas ocasiones también se han realizado un estudio biomecánico del ciclismo.

     Desde el punto de vista anatómico, es muy común encontrar alteraciones posturales y biomecánicas que van a condicionar el posicionamiento del cliente en la bicicleta.

     El examen físico del ciclista se torna de capital importancia, ya que durante el estudio de la biomecánica global del cliente, encontraremos las restricciones o movimientos anómalos, las debilidades musculares, etc que condicionarán los ajustes a realizar en la bicicleta.

     En este examen debemos descartar que no haya neuropatías por atrapamiento en los diferentes canales por los que discurre el plexo braquial y de cada nervio (mediano, cubital y radial) por el brazo, antebrazo y mano.

 
     En las bicicletas de carretera, de geometría de competición, hay una hipersolicitud de la musculatura erectora del raquis, durante largos períodos, para mantener la espalda erguida, dar soporte a la musculatura extensora cervical, para poder mantener la mirada al frente, y de la musculatura lumbopélvica, para mantener la estabilidad en el sillín. Si esta musculatura no trabaja adecuadamente va a provocar un aumento de presión de las manos en el manillar, con lo que, mantenido en el tiempo provocará el adormecimiento de las manos. Cierto es que unos parámetros óptimos de la bicicleta pueden minimizar estos signos.

     En este tipo de ciclistas nos encontraremos una cadena muscular posterior muy acortada con limitación del movimiento de la cadera en un squat (sentadilla). En casos más severos podemos encontrar atonía de los músculos anteriores del abdomen, acortamiento de la musculatura isquiosural, antepulsión del mentón, etc. Existe un síndrome cruzado posterior, o inferior o ambos.

     Los casos más complejos son aquellos que además de estas alteraciones biomecánicas, suman una dismetría con rotación pélvica, ya que el reparto de pesos anteroposterior, entre el sillín y manillar, se verá afectado, realizando un movimiento el centro de masas del ciclista oblicuo, provocando malos apoyos en el sillín y mayor presión en una de las manos.

     Esta clase de «biotipo» ciclista necesita de un ajuste de los parámetros de la bicicleta muy finos, ya que la altura y el alcance del manillar serán importantísimos para encontrar la remisión de estas parestesias.

     Para que este «biotipo» de ciclista mejore su postura, hemos de proporcionarle una tabla acorde a sus necesidades. No todo el mundo con parestesias en las manos tiene las mismas causas, con lo que no tendrá el mismo tratamiento. No vale la misma tabla de ejercicios para todos.

     Para mejorar nuestra posición en la bicicleta, no todo depende de los parámetros de la misma, también es posible minimizar ciertas patologías y molestias con un entrenamiento adecuado del core, que además nos ayudará a aumentar el rendimiento, sobre todo en bicicleta de montaña, ciclocross, etc.
   

   

 

Lesiones en el ciclismo: Adormecimiento de manos.

Tanto en bicicleta de carretera como en MTB muchísima gente sufre parestesias en las manos o dedos.

Las causa normalmente viene producida por un exceso de presión en la mano al coger el manillar.
Este exceso de presión puede ser producido por una diferencia de altura entre el manillar y el sillín demasiado grande (manillar bajo respecto al sillín), llevar una talla grande de bici, llevar una posición demasiado larga…

Normalmente estas parestesias suelen ser producidas por el nervio cubital o por el mediano.
Esto significa que se dormirán los últimos dos dedos (el meñique y el anular) o el segundo y tercer dedo (el índice y el corazón).
 Si se duerme toda la mano la lesión causante estará en el codo u hombro o en cervicales.

Para aliviar estos síntomas vamos a revisar la posición global que llevamos en la bici. Verificar altura del sillín y el avance retroceso. Una vez que hayamos puesto en su sitio en sillín verificaremos la distancia sillín-manillar, que no sea demasiado grande. Recuerda que los codos no pueden quedar estirados por completo (tanto en carretera como en mtb). Si es necesario, cambiar la potencia por una más corta. Después verificamos la altura del manillar.

En mtb depende mucho del tipo de bici y uso que le queramos dar, ya que la geometría varía mucho dependiendo del tipo de bici que usemos. Normalmente estos problemas se dan en bicicletas híbridas, de rally y de maratón.

En carretera sobre todo hay que tener en cuenta el uso que queramos hacer de la bici y nuestras características físicas. Para uso recreacional y amateur con una flexión de tronco de unos 40 grados suele ser suficiente para una postura cómoda. Cuando hay problemas cervicales hay que irnos hasta los 50 o 60 grados, lo que puede provocar tener que cambiar de bici.

Así que busca la mejor postura invirtiendo en un estudio biomecánico y disfruta más y mejor de tu bicicleta.