BODY & BIKE FIT: La Sedestación Simétrica.

     Sentarse correctamente en el sillín es fundamental para no lesionarse y para poder generar la mayor fuerza posible en los pedales.

     En anteriores entradas se explicaban las peculiaridades de los sillines para saber que tipo es el más apropiado.
     Hoy vamos a hablar sobre la manera de sentarnos en el mismo.
        La Sedestación Simétrica es el punto de partida para conseguir el éxito en el tratamiento de las dolencias ocasionadas por una mala postura en la bicicleta.

     Lo primero que tenemos que notar al sentarnos en el sillín son los huesos isquiones.

     En  los casos donde hay un sillín estrecho suelen existír dolores en lumbares, pelvis, sacroilíacas, caderas, rodillas y parestesias, infecciones y dolores en la zona del periné.

 Imagen del periné donde se observan los diferentes nervios que podemos dañar por llevar un sillín estrecho

     La típica afirmación de que el sillín es incómodo creo que esta basada en haber estado utilizado sillines demasiado estrechos durante décadas y más en mujeres, ya que tienen una pelvis más ancha que los hombres.

      Si el sillín es de nuestra talla, se vuelve cómodo, ya que apoyaremos los huesos, siendo más difícil que haya lesión por fricción y no apoyaremos los tejidos blandos comprimiendo las ramas del nervio pudendo causantes del dolor y adormecimiento de la entrepierna.
     Cuando tenemos un apoyo unilateral, de un sólo hueso, ya sea por un sillín pequeño, por una rotación de cadera o por una dismetría de piernas, pueden aparecer los dolores y molestias anteriormente citadas, así como una posible irritación del propio hueso isquión, debido a una inflamación de la bolsa serosa o la irritación del periostio ya que el peso del cuerpo, alrededor del 55%, caerá sobre un sólo punto.

     Para conseguir la sedestación simétrica del ciclista es imperativo un estudio exhaustivo del cliente para entender la causa de esa mala posición en el sillín, ya que puede provenir de una mala pisada, una dismetría de piernas, un desequilibrio muscular, un alteración de la mandíbula, etc.

     Para llegar a la sedestación simétrica hay que usar un sillín de nuestra talla para ser conscientes del apoyo de los huesos, poner la altura necesaria donde las articulaciones del miembro inferior trabajen en las angulaciones apropiadas, asegurarse de que las calas están colocadas en la posición correcta y que la distancia sillín-manillar sea la adecuada para la patología que tenga el ciclista.

     ¡Con la Sedestación simétrica disminuirás los dolores y aumentarán los watios!

      

     

BODY & BIKE FIT: Ajuste gravitacional y sedestación simétrica.

     Nuevo caso muy interesante de biomecánica del ciclismo.

     En este caso se trata de una ciclista que ya había sido «biomecanizada» pero seguía presentando dolores en la articulación sacroilíaca izquierda y sobrecarga en el hombro homolateral.

     Como antecedentes cabe destacar un antigua fractura de la pala ilíaca izquierda.

     En el examen físico se observaba una pierna corta izquierda que parecía real, ya que el examen detallado de esa posible dismetría parecía confirmarlo.

     En el examen dinámico sobre la bicicleta se encontró un apoyo unilateral sobre el isquión derecho que parecía confirmar la dismetría, lo que estaba provocando una inflamación de los ligamentos sacroilíacos izquierdos.

                            
   

      Se realizó el ajuste gravitacional para corregir la dismetría sobre la bicicleta y se consiguió un apoyo bilateral de los isquiones: la sedestación simétrica en el sillín.

     Aún habiendo conseguido un buen resultado inicial, se pidió una radiografía para poder estudiar las secuelas que hubiese dejado la fractura en la pelvis.

                         


 

      Tras la primera salida el feedback fue positivo, pero en la segunda salida, que coincidía con la marcha Sierra Norte, volvieron los dolores, con lo que el ajuste no era el adecuado.

     Una vez que tuvimos la radiografía comprendimos qué era lo que estaba ocurriendo. Una antigua fractura por traumatismo había producido un decalaje en la sínfisis púbica. También confirmaba una dismetría donde la pierna corta real era la derecha.

     Con estos datos, más el feedback aportado por la ciclista, ya se pudo hacer la corrección necesaria: fuera alzas, sillín de su talla y apropiado a su morfología y tipo de conducción, ajuste gravitacional moviendo sillín y cambiando potencia para conseguir la sedestación simétrica en el sillín.

     Las sensaciones han sido buenas y los resultados positivos. Sigue cayendo ligeramente hacia la izquierda pero esperamos que se vaya corrigiendo a medida que siga con la sedestación simétrica igualando las tensiones musculares.

Dismterías, alzas y triatlón.

     Un nuevo caso de biomecánica del ciclismo.

     Un cliente que tras un accidente de tráfico presenta un fémur cinco centímetros más corto que el derecho y una parálisis del plexo braquial y del hemidiafragma derecho.

     Venía a consulta para intentar mejorar la postura ya que iba a comenzar con pruebas de larga distancia.

     Presentaba un dolor al pedalear exquisito en la cola del quinto metatarsiano del pie de la pierna corta.

     Tras la anamnesis donde me cuenta el trabajo realizado por los cirujanos en la rodilla acomodando y cambiando las inserciones musculares de los músculos vastos, externo e interno, procedemos al examen postural.
     La dismetría medida era de cuatro centímetros por compensaciones del sistema músculoesquelético había conseguido alargar un centímetro.

     En el estudio biomecámico sobre la bicicleta, lógicamente, la pelvis basculaba en exceso hacia esa pierna corta, el ciclista había puesto un alza casero tratando de mejorar de unos 6 mms. 
     Al bascular al lado derecho estaba provocando un exceso de presión en el quinto meta.
     Cómo siempre un buen sillín, acorde a las necesidades de la pelvis del ciclista y el menor alza posible consiguieron una pelvis estable.
     En este caso el alza fue de 9 mms.

     Una vez más se pone de manifiesto la necesidad de estudiar a fondo la interacción del cuerpo con los elementos de la bicicleta ya que no sólo se corrige una dismetría con la puesta de alzas, hay que realizar un ajuste gravitacional del ciclista para observar que ocurre en el cuerpo.

La importancia del tipo y talla del sillín.

     Aquí tenemos un claro ejemplo de la necesidad de tener un sillín adecuado a las características de cada ciclista.

     Este caso además es reseñable ya que el cliente tiene una dismetría de miembros inferiores de más de 5 mm que no ha hecho falta corregir.

     En este caso el cliente venia con un sillín marca essax de 130 mm de ancho.

     Al observar al cliente me llamó mucho la atención la hipermovilidad reaccional que existía en la pelvis.
     Cambiamos el sillín por un selle italia 145 mm de ancho.
   

     La valoración subjetiva del cliente fue la típica en estos casos: «ahora si que noto los huesos apoyados».
     La valoración objetiva la vemos en el vídeo. Se consiguió fijar las caderas y aumentar la potencia de pedaleo.
 

El Sillín de la bicicleta y sus peculiaridades.

Es muy importante tener el sillín de nuestra medida, ya que necesitamos de un buen apoyo de los isquiones para poder realizar toda la fuerza con las piernas sin gastar energía en tener que estabilizar la pelvis con el sobreesfuerzo de la musculatura de la pelvis y de la cadera.
Con un sillín pequeño, estaremos sentándonos sobre nuestro periné (entrepierna), estando predispuestos entonces a sufrir lesiones,desde irritaciones de la piel que en esa zona es muy sensible, parálisis del nervio pudendo, inflamación de la próstata….
Esta falta de apoyo duro producirá un movimiento anómalo de la pierna al hacer fuerza sobre el pedal ya que careceríamos del apoyo necesario de la pelvis para que la pierna trabajase en el eje ideal estando alineadas las articulaciones del tobillo, rodilla y cadera pudiendo producir también lesiones en la rodilla al perderse esa alineación.
Así mismo esta falta de apoyo en el sillín producirá un movimiento excesivo de las articulaciones sacroilíacas y en la última vértebra lumbar (L5) pudiendo producir un desgaste prematuro del disco (hernias discales), lumbagos y lumbalgias.
Un sillín mal posicionado también nos acarreará problemas.
Si la punta del sillín esta inclinada hacia arriba volveremos a hacer presión sobre el periné.
Si esta hacia abajo tenderemos a deslizar hacia delante produciendo irritación en esa zona además de tener que hacer más presión en el manillar con las manos pudiéndonos producir dolores cervicales, hormigueos…
En la mayoría de tiendas nos podrán medir la distancia entre isquiones para poder elegir el sillín de nuestra talla. Cuando compremos una bici también deberemos hacer esta medición.

Antes y después de un estudio biomecánico sobre la bicicleta.

Estudio biomecánico realizado a una triatleta.
Presentaba problemas en el periné, pelvis y rodilla.
La imagen de la izquierda corresponde a antes de realizar los ajustes.
El mayor problema que tenía era por tener un sillín demasiado estrecho con lo que no tenía un buen apoyo. Se puede observar cómo se mueve sobre la bicicleta en la imagen de la izquierda.
Así mismo se ha dejado una posición alta del manillar ( poco aerodinámica ) por tener un problema óseo cervical.