Ya vimos anteriormente una introducción sobre la fascia lata, sus causas y tratamiento.
Vamos a explicar más causas de esta patología.
Esta patología va asociada a un problema postural global que muchas veces necesita de tratamiento de fisioterapia para poder subsanarlo, no sólo una recolocación en la bicicleta.
Normalmente si sólo hay una pequeña inflamación y/o contractura se suele corregir colocando bien el sillín y alineando el tracking rotuliano.
Si la lesión viene determinada por una mala colocación en el sillín que a su vez puede venir por una mala colocación de las calas o un error de corrección de una dismetría, es necesario trabajar la postura tanto en la bicicleta como en el día a día con ejercicios específicos posturales. En la bicicleta tendremos que ser pacientes y hacer un trabajo lento pero constante para ir automatizando la nueva postura y los nuevos movimientos.
Es muy común que un problema postural impida colocarse adecuadamente en la bicicleta.
Como tratamiento básico encima de la bicicleta, recolocaremos el sillín, normalmente hay que bajarlo, corregir la posición de las calas y evitar tirar de los pedales hacia arriba.
Si al corregir estos parámetros no mejora, hay que estudiar que pisemos bien, que no se rote el pie hacia adentro, que no rote la tibia o la rodilla entera y que vayamos bien sentados en el sillín.